rEDUvolution
Dinamitando la educación del siglo XIX… en pleno siglo XXI.
María Acaso, educadora e investigadora en el área de educación artística, acuña el término rEDUvolution para nominar la propuesta educativa con la que sale al paso al, ya lento, paso de la educación estándar.
Nos dice –como hace tiempo nos vienen diciendo cientos de investigadores en materia educativa- que todas las áreas de concomimiento y producción en el mundo han cambiado sus dinámicas internas, menos la educación: sigue reproduciendo los paradigmas de la revolución industrial en cuanto que la escuela aún funciona como una fábrica de individuos que deben saber y entender lo mismo, y de la misma manera.
Llama la atención la terminología a la que recurre, bastante pop, como si quisiera romper el hielo de la propedéutica y jugar un poco con su sempiterna seriedad y rigidez. Pero estos términos, más que curiosos, aluden a una cultura vigente: la que los niños y jóvenes de hoy observan.
María Acaso, dice que los maestros –en verdad, los “coaches”, “acompañantes”, “artistas” o “gestores culturales”, como aproximativamente los considera- deben, en vez de imponer contenidos, hacer un buen “playlist” con los temas que a sus alumnos les interesen, una variedad atractiva y jugosa de propuestas basadas en lo que el alumno desea saber y no en lo que el maestro desea enseñar.
¡Hey! Pero además, toda esta jerarquización entre maestro y alumnos -en cuanto a títulos y dirección del conocimiento-, es también obsoleta: los “coaches”, en verdad, son todos los miembros del aula; tanto los alumnos como los maestros se acompañan en un proceso de aprendizaje y descubrimiento conjunto.
A esta lista de términos iconoclastas, se suma el de “edupunk”, que hace referencia a todas las propuestas alternativas en materia educativa.
Puede que esta terminología nos suene a un marketing jalado de los pelos, pero no deja de ser cierto lo que dice: que nuestro sistema educativo está completamente desfasado del medio en el que viven los niños de hoy, de los estímulos que los rodean, de sus herramientas de aprendizaje, de la abundancia de fuentes de información, cada vez más accesibles y por lo tanto, generando cada vez más estupendos autodidactas.
¿Cómo no atender a una propuesta- …más, sí, una más- para enrumbarnos hacia una educación más coherente para los niños del siglo XXI?
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